Las TIC actualmente son una herramienta
muy importante para la educación, ya que éstas ayudan y facilitan las tareas de
alumnos y docentes. Facilitan la comunicación, la investigación y la obtención
de información.
La aparición de estas nuevas
tecnologías produjo un gran desafío e impacto para la educación, sobre todo
para el docente.
El uso de las tecnologías de la información y la comunicación en los diferentes niveles y sistemas educativos tiene un impacto significativo en el desarrollo del aprendizaje de los estudiantes y en el fortalecimiento de sus competencias para la vida y el trabajo que favorecerán su inserción en la sociedad del conocimiento.
Realidades
Los docentes se encuentran presionados por tres fuerzas contrapuestas. Por un lado, se les demanda que sean innovadores, autónomos y que desarrollen propuestas educativas flexibles que permitan articular distintos campos de conocimientos. Desde este enfoque el docente es un aprendiz en proceso permanente de actualización que se asume como un promotor de los cambios sociales más generales. Por otro lado, se les exige la transmisión de valores que promuevan una mayor cohesión social para contrarrestar problemas sociales como la violencia, la inseguridad y el consumo. Por último, los docentes aparecen como víctimas de la Sociedad de la Información, en la medida en que son afectados negativamente por políticas que tienden a erosionar las condiciones de trabajo, tanto en términos de recursos materiales como de su autonomía profesional.
Involucrar a estas nuevas tecnologías en el aula requiere por parte del docente una actualización o modernización de la forma de aprendizaje, implica una suma de nuevas tareas no previstas en las actividades habituales de los docentes. A veces esto supone la adquisición de nuevos saberes.
Temores de los docentes con la tecnología y las necesidades para la capacitación
Estiman
que el tiempo de dedicación para su labor docente se aumenta.
Poca disponibilidad de espacios destinados a las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
Preocupación por saber cuál es el modelo pedagógico más idóneo para aprovechar las potencialidades en el aula.
La formación que se recibe, tanto tecnológica como pedagógica, es insuficiente o ineficaz ya que en muchos casos no responde a las necesidades reales del momento.
La utilización de las TIC puede aumentar las diferencias entre alumnos y también entre profesores ya que no en todos los hogares se dispone de la misma tecnología ni de igual conectividad.
El cambio de metodología implica perder elementos muy útiles de la educación tradicional
Algunos estudiantes y maestros no tienen la madurez, autonomía o valor crítico suficiente como para hacerse responsables de su propio aprendizaje utilizando la tecnología.
Muchos de
los docentes tienen miedo a enfrentar la realidad tecnológica porque no están
preparados para esto, a raíz de esto surge la gran necesidad de ser capacitados
en todo lo relativo a su trabajo educativo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario